En esta nueva entrega de la serie #GestoresEnLaCancha, conoceremos la actualidad profesional de Mariela Silva, una licenciada en Gestión Social que ha estado cumpliendo un papel crucial como Cónsul Adscrita del Perú en La Paz, Bolivia. Como parte de sus funciones, Mariela se dedica a velar por el bienestar de los peruanos en la región, trabajando en estrecha colaboración con las autoridades bolivianas para planificar soluciones públicas.

Desde abril de 2021, Mariela ha estado gestionando ayuda humanitaria para nuestros compatriotas que se han visto afectados por la pandemia. Su meta es repatriarlos a Perú con la ayuda de aliados estratégicos y autoridades locales, en coordinación con sus pares peruanos. «Estamos trabajando arduamente para proporcionar soluciones rápidas y efectivas que ayuden a nuestros compatriotas a superar estos momentos difíciles«, nos dice Mariela con gran pasión.

Nuestra egresada considera que la planificación de estrategias es un reto constante en su labor como Cónsul, ya que los ámbitos de ayuda humanitaria, promoción cultural y promoción económica, requieren de una creatividad constante para encontrar soluciones de valor público para nuestros compatriotas.

Después de su labor como Cónsul en La Paz, Mariela tiene planes de seguir capacitándose en Desarrollo Internacional y explorar el área de relaciones exteriores en el ámbito multilateral, como representante del Perú frente a un organismo internacional. Su pasión por la diplomacia se inició cuando descubrió que este campo le permitiría ser un actor activo en la contribución al desarrollo de su país natal.

Repasando su pasado universitario, ella enfatiza que su conocimiento en gestión social, planificación estratégica y gestión de proyectos, obtenido en la FGAD, es la base sólida de su desempeño profesional actual. «La gestión social es importante y sensible porque te permite cambiar la vida de las personas. Por eso, decidí especializarme en esta área«, nos dice Mariela con entusiasmo.

Finalmente, la gestora recomienda a los alumnos avanzar en sus estudios y prácticas a su propio ritmo para que disfruten del proceso de aprendizaje y eviten compararse con los logros de otras personas. Aprovecha a su vez, de aconsejar a aquellos que también estén interesados en la diplomacia: “Son cuarenta años de servicio al Perú en este ámbito enriquecedor. Entonces, es una decisión de vida y debe ser tomada a conciencia.”