Conoce el proyecto "El Calor de las Otras"
El jueves 2 de noviembre se presentó el proyecto «El Calor de las Otras», acción de Responsabilidad Social Universitaria concebida y gestionada desde la Carrera de Comunicación Audiovisual de la Facultad de Ciencias y Artes de la Comunicación (FCAC) de la PUCP. Esta acción ha sido seleccionada para el fondo de Responsabilidad Social Universitaria (RSU) para unidades académicas 2023 de la Dirección Académica de Responsabilidad Social (DARS) de la PUCP.
La esencia de esta acción surge del deseo de crear un espacio para la atención, creación e intercambio de voces y perspectivas femeninas, así como para fomentar la colaboración entre instituciones vecinas. La propuesta se centra en una experiencia compartida entre estudiantes mujeres de la Facultad de Ciencias y Artes de la Comunicación de la PUCP y adolescentes mujeres del Centro Juvenil Santa Margarita. Pre-Docentes de la FCAC acompañaron la creación libre a partir de los temas, formas y contenidos planteados por las participantes.
Aldo Cáceda, acompañante de este proyecto, compartió lo que se lleva de haber sido parte de esta experiencia:
Conocemos y creemos, hablo en nombre del equipo de acompañantes (talleristas), que la experiencia de ECDLO nos reafirma en lo que hemos venido desarrollando en diversos proyectos. Estamos convencidos de que mediante el trabajo colectivo se logra generar algo que parece tan simple, pero que a la vez es tan complicado: el bienestar.
Desde nuestro punto de vista, el arte se presenta como un medio integrador y conciliador frente a las polaridades de estructuras ya instaladas como «normales». El tránsito por un proceso de creación permite reunir lo que está fraccionado: pensamientos, emociones, recuerdos, cuerpos, imaginación, dudas, temores, deseos, sueños, ilusiones; todo aquello que nos conforma. También permite cuestionar, derribar mitos y estigmas, reconocerse en ese cuestionamiento, replantear realidades, aunque sean imaginadas, deconstruir y reconstruir de forma constante e inagotable.
Aldo prosigue:
Cuando se dan las condiciones, son las mismas personas, en este caso, las jóvenes creadoras, quienes van abriendo estos caminos, adquiriendo seguridad, fortaleza y emoción de pertenencia. Les permite cultivar otra mirada hacia ellas mismas y hacia los demás. Crear es una forma de hacerse cargo de uno mismo, escarbar muy adentro, sumergirse en un lugar de incertezas, dudas y riesgos; pero también de afecto y esperanza. Es a partir de esta experiencia cuando las realidades particulares se integran de manera colectiva y se expanden generando belleza.
El arte se convierte entonces en una gran posibilidad para todas. Experiencias como esta nos devuelven la consciencia de la importancia de la creación en nuestras vidas, del derecho que todas tenemos a crear. ¿Qué ocurriría si la experiencia de creación colectiva se integrara de forma activa a la vida universitaria? ¿Qué pasaría con las jóvenes del centro juvenil, si en el tránsito por esta etapa, encontraran constante contacto con la creación? ¿Qué ocurriría si en nuestra convivencia social existieran puentes para conocernos desde espacios como ECDLO? ¿Hasta qué punto las universidades están siendo partícipes en la generación de espacios de bienestar tanto para adentro como para afuera?
Te invitamos a revisar la memoria del proyecto y conocer más aquí.
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