El equipo Renova, conformado por las alumnas de Gestión Nagely Mamani Apaza, Daniela Peña More y Nora Oré Espinoza, junto con Enrique Alonso Serrano Salas, estudiante de Economía, resultó ganador con la propuesta “Navegando Saberes” en el 8vo Concurso de Ciencias de la Gestión, el cual finalizó el pasado 9 de noviembre. 

El concurso se desarrolló en dos fases. En la primera, 15 equipos utilizaron un simulador gerencial que replicó el proceso de toma de decisiones en áreas clave de una empresa. Después de tres rondas y con el puntaje obtenido, el simulador seleccionó a 5 equipos para la fase final. 

En la segunda fase, los equipos clasificados resolvieron un caso titulado: “Mejora del acceso y calidad educativa en una región rural de Perú”, que trajo consigo problemas relacionados con infraestructura, así como acceso y sostenibilidad educativa en zonas rurales. Se evaluaron factores como la creatividad, la innovación, el impacto social y la rentabilidad.

Es así como “Navegando Saberes”, un proyecto destinado a llevar educación de calidad a los niños de las comunidades de Putumayo (Loreto) a partir de la creación de aulas flotantes, logró ser la propuesta ganadora. “Es más que solo un trabajo que postulamos al concurso, se trata de un compromiso que cada uno de nosotros ha asumido con los niños de Putumayo”, precisa Daniela.  

Desde búsquedas bibliográficas y entrevistas, el equipo encontró que Putumayo es una de las provincias más olvidadas de Loreto, en el que los índices de escolaridad son bajos y donde resalta la precariedad de las infraestructuras y la calidad educativa. “Los profesores compartieron con nosotros su preocupación por lo difícil que resulta que los niños lleguen a las escuelas”, detalla Nagely. 

Los estudiantes pusieron el foco sobre la accesibilidad a la educación. Así, plantearon que sean las escuelas las que lleguen a los niños mediante transporte fluvial. Su propuesta apunta a que los profesores sean embarcados en botes hacia Putumayo durante alrededor de dos días. “Esperamos que, eventualmente, los profesores asignados a cada parte de Putumayo pertenezcan a la misma comunidad”, explica Nora.

La investigación que realizó el grupo “Renova” encontró varios estudios sobre la capacidad de imitación y el desarrollo de admiración durante la etapa de la niñez. “Hemos contemplado la posibilidad de que los niños encuentren en la educación, también, una vocación de servicio”, comenta Daniela. 

En retrospectiva, el equipo reconoce la destreza con la que tuvieron que actuar frente a cada desafío que se presentó durante el concurso. “Durante la primera fase, el simulador nos enseñó que debíamos tomar decisiones arriesgadas y confiar más en nuestra capacidad de análisis y respuesta, ese cambio de actitud fue esencial para llegar a la última etapa de la competencia”, cuenta Enrique. 

Asimismo, concuerdan en la importancia de promover este tipo de concursos interdisciplinarios, en los que cada estudiante puede aportar y marcar la diferencia desde su especialidad. “Nosotras desde la gestión y Enrique desde la economía, hicimos de “Renova” un equipo con una visión integral, que combinó estrategias de desarrollo sostenible con un manejo de datos sólido”, señala Daniela. 

De tal modo, desarrollar una propuesta innovadora que no solo resultó destacable, sino socialmente responsable, llevó al equipo a conseguir el primer lugar. “Está entre nuestras metas continuar en búsqueda de fondos y seguir capacitándonos, ya que nos gustaría que este proyecto sea una realidad”, termina Nora.